es que son encantadores.
Este mediodía después de la clase de piano nos hemos ido con Elsa y su maravilloso nieto Jean-Micheal almorzar al Le Petit Ozio (6, avenue Bugeaud 75016 Paris), un restaurante encantador con un servicio de lo más simpático. Una buena alternativa al Convivium.
Y ya podéis ver como iban los dos. Cogidos del brazo y hablando de lo más tranquilos. Y después dicen que no siguen el ejemplo de sus padres. Rosita es tremenda!!! Será por eso que es tan encantadora (amor de madre).
Bueno a ver que pasa esta noche. Nosotros de momento seremos unos cuantos en casa animando al Barça hasta el final. FORÇA BARÇA!!!
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